Nuestra MODALIDAD DE TRABAJO y de aproximación a la problemática clínica de los usos del síntoma recorre dos vías bien diferenciadas, aunque articulables, cada una con su material específico y con su impronta propia.
Por un lado, la vía de los TRABAJOS PRÁCTICOS, donde los alumnos encontraran una oferta variada de materiales clínicos de actualidad, desprovistos de las articulaciones teóricas que suelen estar presentes cuando se trata de casos ya elaborados.
La modalidad consiste en el trabajo de lectura y discusión de una casuística proveniente de dos dispositivos diferentes: el procedimiento freudiano del Análisis y el procedimiento lacaniano del Pase. En el primer caso, el del Análisis, se trata del ejercicio de lectura de experiencias relativamente cortas, narradas por quien ocupa u ocupó el lugar del analista, en las que puede rastrearse la pregunta por la función del síntoma en los preliminares del análisis o en los comienzos del proceso analítico propiamente dicho. En el segundo caso, el del Pase, se trata de experiencias de análisis finalizados, enunciadas por quien fuera el analizante y relatadas luego de haber pasado por el procedimiento institucional que lo condujo al lugar de Analista de la Escuela. Por esa razón, esta otra clase de testimonios permiten situar la construcción del caso desde la perspectiva de su punto conclusivo, poniendo el acento sobre lo incurable del síntoma y sobre su relación con el surgimiento del deseo del analista. En ambos casos se trata de un trabajo que prolonga un poco más allá el horizonte de los casos freudianos, aportando un abanico más amplio de presentaciones clínicas, y de una modalidad de acercamiento a la experiencia que pone al alumno frente al ejercicio del manejo (handhabung) de un material clínico, con el objetivo de hacer surgir de allí la lógica del Caso. Por otro lado, la vía de los DESARROLLOS TEÓRICOS, donde los alumnos se verán confrontados con los problemas cruciales del psicoanálisis, y con el tratamiento de los conceptos que intentan darle respuesta. La noción de síntoma, claro está, tendrá el papel protagónico. En ese caso, la modalidad de trabajo consiste en el despliegue de las referencias textuales que permiten delimitar el valor que posee la noción de síntoma dentro de las coordenadas específicas de la práctica psicoanalítica. En primer lugar, situando sus definiciones y estatutos tanto en la obra de Freud como en la enseñanza de Lacan. En segundo lugar, desplegando los diferentes usos del síntoma que pueden reconocerse en la práctica clínica y en la dirección de la cura. Y en tercer lugar, deduciendo las consecuencias que pueden extraerse respecto de la posición del analista: de su acto, su deseo y su maniobra (handhabung) analítica.
Por último, hay una tercera vía que ubicamos en el cruce de caminos entre PRÁCTICOS y TEÓRICOS. Variable más difícil de calcular, pero en la que los docentes de la cátedra depositamos gran parte de nuestra expectativa de transmisión de la Handhabung del síntoma: la vivencia íntima y singular (y en muchos casos sintomática) de todo aquel que se involucra en la experiencia del inconsciente y su transmisión, y no puede avanzar sin poner algo de sí.